Paxil (paroxetina) es un antidepresivo de la clase de inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) ampliamente prescrito para el manejo de trastornos depresivos mayores, trastornos de ansiedad y condiciones relacionadas. Desarrollado tras décadas de investigación en neurofarmacología, este fármaco actúa restaurando el equilibrio de serotonina en el cerebro, un neurotransisor clave en la regulación del estado de ánimo, las emociones y el comportamiento. Su perfil farmacológico bien establecido y su eficacia demostrada en numerosos estudios clínicos lo convierten en una opción terapéutica fundamental dentro del arsenal psiquiátrico moderno. La administración debe realizarse exclusivamente bajo supervisión médica especializada.

Características

• Principio activo: Clorhidrato de paroxetina hemihidratado
• Clase terapéutica: Inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina (ISRS)
• Presentaciones disponibles: Comprimidos recubiertos de 10 mg, 20 mg, 30 mg y 40 mg
• Vida media eliminación: Aproximadamente 21 horas en pacientes adultos
• Biodisponibilidad: Completamente absorbido tras administración oral
• Metabolismo: Hepático, principalmente mediante CYP2D6
• Excreción: Renal (64%) y fecal (36%)

Beneficios

• Mejora significativa de los síntomas depresivos en 2-4 semanas de tratamiento continuado
• Reducción de la frecuencia e intensidad de los ataques de pánico en trastornos de ansiedad
• Efecto ansiolítico sostenido que permite la recuperación funcional del paciente
• Restablecimiento de los patrones de sueño y apetito alterados en la depresión
• Disminución de los síntomas somáticos asociados a trastornos ansiosos
• Prevención de recaídas en episodios depresivos recurrentes

Usos comunes

Paxil está indicado para el tratamiento del trastorno depresivo mayor en adultos, trastorno de ansiedad generalizada, trastorno de pánico con o sin agorafobia, trastorno obsesivo-compulsivo, trastorno de estrés postraumático y fobia social. También se emplea en el manejo de los sofocos moderados a severos asociados a la menopausia. La prescripción debe basarse en una evaluación psiquiátrica completa que confirme el diagnóstico y descarte contraindicaciones.

Dosificación y administración

La dosis inicial recomendada para adultos es de 20 mg una vez al día, preferentemente por la mañana con alimentos. Según la respuesta clínica y la tolerabilidad, la dosis puede incrementarse en incrementos de 10 mg diarios hasta un máximo de 50 mg/día para la depresión y 60 mg/día para el trastorno obsesivo-compulsivo. En pacientes ancianos o con insuficiencia hepática/renal se recomienda iniciar con 10 mg/día. La administración debe ser continua, sin masticar o triturar el comprimido. El tratamiento nunca debe suspenderse abruptamente debido al riesgo de síndrome de discontinuación.

Precauciones

Se requiere monitorización estrecha durante las primeras semanas de tratamiento por el potencial aumento del riesgo de ideación suicida, especialmente en menores de 25 años. Debe evaluarse regularmente la función hepática y renal en tratamientos prolongados. Pacientes con historial de manía/hipomanía deben ser estrechamente supervisados. Puede afectar la capacidad para conducir o operar maquinaria durante el periodo de ajuste posológico. El uso durante el embarazo solo debe considerarse si el beneficio justifica el riesgo potencial.

Contraindicaciones

Hipersensibilidad conocida a paroxetina o excipientes, administración concomitante con inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO) o within 14 días de su discontinuación, tratamiento con tioridazina o pimozida. Contraindicado en pacientes con glaucoma de ángulo estrecho no controlado y en aquellos con síndrome de QT largo congénito o adquirido. Precaución extrema en pacientes con epilepsia no controlada o historial de trastornos hemorrágicos.

Efectos adversos posibles

Frecuentes (≥1/10): Náuseas, somnolencia, astenia, insomnio, sudoración, sequedad bucal, estreñimiento, disfunción sexual. Poco frecuentes (≥1/1000): Visión borrosa, palpitaciones, aumento de peso, temblor, mareo. Raros (≥1/10,000): Síndrome serotoninérgico, hiponatremia, sangrado anormal, reacciones cutáneas graves. La mayoría de efectos adversos son transitorios y disminuyen con la continuación del tratamiento.

Interacciones medicamentosas

Interacciones mayores con IMAOs, anticoagulantes oralés, antiinflamatorios no esteroideos, otros serotonérgicos, tramadol y triptanes. Interacción moderada con inhibidores del CYP2D6 (quinidina, fluoxetina) que pueden aumentar niveles de paroxetina. Inductores enzimáticos (carbamazepina, fenitoína) pueden disminuir su concentración plasmática. Precaución con diuréticos y medicamentos que prolonguen el intervalo QT.

Dosis olvidada

Si se olvida una dosis, tomarla tan pronto como se recuerde, unless es casi la hora de la siguiente dosis. En ese caso, omitir la dosis olvidada y continuar con el horario regular. Nunca duplicar dosis para compensar la olvidada. Mantener un horario consistente maximiza la eficacia terapéutica.

Sobredosis

Los síntomas incluyen náuseas, vómitos, temblor, agitación, mareo, taquicardia y midriasis. En casos graves puede presentarse convulsiones, coma o síndrome serotoninérgico. No existe antídoto específico; el tratamiento es sintomático y de soporte. El lavado gástrico y la administración de carbón activado pueden considerarse si la ingestión es reciente. Monitorización cardíaca y de signos vitales es esencial.

Almacenamiento

Conservar en envase original a temperatura ambiente (15-30°C), protegido de la luz y humedad. Mantener fuera del alcance de niños. No utilizar después de la fecha de caducidad indicada en el envase. Desechar apropiadamente los comprimidos no utilizados a través de puntos SIGRE de farmacias.

Advertencia legal

Este contenido tiene fines informativos y no sustituye el criterio médico profesional. Paxil es un medicamento sujeto a prescripción médica. La automedicación con antidepresivos conlleva riesgos graves para la salud. Consulte siempre a un profesional sanitario cualificado para diagnóstico y tratamiento apropiados. La dosificación y duración del tratamiento deben individualizarse según las características del paciente.

Evaluaciones clínicas

Estudios multicéntricos controlados con placebo demuestran eficacia significativa superior a placebo (p<0.001) en la escala de Hamilton para la depresión. Metaanálisis de 42 estudios confirma mejoría sostenida en el 65-70% de pacientes con trastorno de pánico. Perfil de seguridad consistentemente favorable en seguimientos a largo plazo, con persistencia terapéutica demostrada hasta por 12 meses. La relación beneficio-riesgo se mantiene favorable en población adulta con supervisión médica adecuada.