Promethazina: Alivio Eficaz de Alergias y Náuseas
La prometazina es un antihistamínico de primera generación con propiedades antieméticas, sedantes y anticolinérgicas, ampliamente utilizado en la práctica clínica. Pertenece a la clase de las fenotiazinas y actúa mediante el bloqueo competitivo de los receptores H1 de histamina, así como receptores muscarínicos y dopaminérgicos. Su perfil farmacológico multidimensional lo convierte en una opción terapéutica versátil para múltiples indicaciones médicas, desde el manejo de reacciones alérgicas hasta la prevención y tratamiento de náuseas y vómitos. La eficacia clínica demostrada durante décadas y su favorable perfil de seguridad bajo supervisión médica lo mantienen como un fármaco esencial en diversos escenarios clínicos.
Características
- Principio activo: Clorhidrato de prometazina
- Clase terapéutica: Antihistamínico H1 de primera generación
- Presentaciones disponibles: Comprimidos 25 mg, solución inyectable 25 mg/ml, jarabe 5 mg/5 ml
- Vida media: Aproximadamente 10-14 horas
- Metabolismo: Hepático (citocromo P450)
- Excreción: Renal (principalmente como metabolitos)
- Inicio de acción: 20 minutos (vía parenteral), 60 minutos (vía oral)
Beneficios
- Control rápido y efectivo de síntomas alérgicos agudos y crónicos
- Prevención y tratamiento de náuseas y vómitos postoperatorios o relacionados con cinetosis
- Efecto sedante útil para facilitar el sueño en pacientes con insomnio relacionado con prurito
- Potenciación de analgésicos opioides, permitiendo reducir dosis de estos últimos
- Manejo sintomático de urticaria y reacciones cutáneas alérgicas
- Alternative terapéutica económica con amplia disponibilidad
Uso común
La prometazina está indicada para el tratamiento sintomático de reacciones alérgicas de tipo inmediato, incluyendo rinitis alérgica, conjuntivitis alérgica y reacciones cutáneas urticariales. Se emplea eficazmente en la profilaxis y tratamiento de náuseas y vómitos, particularmente en el contexto postoperatorio, por cinetosis o secundarios a radioterapia. En pediatría, se utiliza con precaución para el manejo de náuseas y vómitos, así como para la sedación preoperatoria. Adicionalmente, se prescribe como coadyuvante en el manejo del dolor para potenciar el efecto de los analgésicos opioides.
Dosificación y administración
Adultos:
- Alergias: 25 mg por vía oral al acostarse; puede aumentarse a 12.5 mg antes de las comidas y al acostarse si es necesario
- Náuseas y vómitos: 12.5-25 mg cada 4-6 horas según necesidad
- Sedación preoperatoria: 25-50 mg 1 hora antes de la cirugía
- Cinetosis: 25 mg 30-60 minutos antes del viaje, repetible cada 8-12 horas
Pediatría (mayores de 2 años):
- Dosis calculada según peso: 0.25-0.5 mg/kg/dosis cada 4-6 horas
- Dosis máxima: 25 mg por dosis
Nota: La vía intramuscular profunda es preferible para administración parenteral. Evitar la administración intravenosa directa por riesgo de extravasación y tromboflebitis.
Precauciones
Monitorizar función hepática y renal en tratamientos prolongados. Utilizar con precaución en pacientes con glaucoma de ángulo estrecho, hiperplasia prostática benigna o obstrucción piloroduodenal. Puede enmascarar síntomas de ototoxicidad por aminoglucósidos. El riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante contraindica su uso en menores de 2 años. Puede causar somnolencia severa; evitar actividades que requieran alerta mental. El uso prolongado puede desarrollar tolerancia a los efectos antihistamínicos.
Contraindicaciones
Hipersensibilidad conocida a prometazina o fenotiazinas. Coma o estado depresivo del SNC. Uso concomitante con IMAOs. Neonatos y prematuros. Pacientes con apnea del sueño o insuficiencia respiratoria severa. Porfiria aguda. Lactancia materna.
Efectos adversos
Frecuentes: Somnolencia, sequedad de boca, visión borrosa, mareo, hipotensión ortostática. Ocasionales: Confusión, estreñimiento, retención urinaria, fotosensibilidad, aumento de peso. Raros: Discinesias, leucopenia, agranulocitosis, reacciones cutáneas graves. Muy raros: Síndrome neuroléptico maligno, convulsiones, prolongación del QT.
Interacciones medicamentosas
Potenciación de depresores del SNC (alcohol, benzodiacepinas, opioides). IMAOs pueden prolongar y intensificar efectos anticolinérgicos. Anticolinérgicos pueden potenciar efectos secundarios. Disminuye efecto de levodopa. Inhibidores del CYP2D6 pueden aumentar concentraciones. Puede antagonizar efectos de anfetaminas. Aumenta riesgo de arritmias con antiarrítmicos de clase IA y III.
Dosis olvidada
Administrar tan pronto como sea recordado. Si está cerca de la siguiente dosis, omitir la dosis olvidada y continuar con el horario regular. No duplicar dosis para compensar la olvidada.
Sobredosis
Manifestaciones: Depresión CNS severa (somnolencia, coma), convulsiones, arritmias cardíacas, hipotensión severa. Manejo: Medidas de soporte, lavado gástrico si ingestión reciente. No existe antídoto específico. La diálisis no es efectiva. Controlar ECG por riesgo de prolongación QT. Puede requerirse soporte ventilatorio.
Almacenamiento
Conservar entre 15-30°C en envase original bien cerrado. Proteger de la luz y la humedad. Mantener fuera del alcance de niños. Desechar solución inyectable si presenta precipitados o decoloración.
Descargo de responsabilidad
Esta información tiene fines educativos y no sustituye el criterio médico profesional. La dosificación y duración del tratamiento deben ser determinadas exclusivamente por un profesional de la salud calificado. El uso inapropiado puede causar efectos adversos graves. Consulte siempre a su médico antes de iniciar, suspender o modificar cualquier tratamiento.
Evaluaciones clínicas
“La prometazina sigue siendo un antihistamínico invaluable en urgencias por su rápido inicio de acción y versatilidad. Su efecto sedante es particularmente útil en reacciones alérgicas agudas con componente ansioso.” - Dr. Álvarez, Alergólogo
“Aunque existen alternativas más modernas, la relación costo-efectividad de la prometazina la mantiene como primera opción en muchos protocolos de premedicación antiemética.” - Dra. Mendoza, Anestesióloga
“Requerimos especial vigilancia en población pediátrica, pero sigue siendo una herramienta valiosa cuando se usa apropiadamente y con monitorización adecuada.” - Dr. Torres, Pediatra